Historia de Roma - La civilización en la época romana
Historia de Roma - La civilización en la época romana
La empresa
La sociedad romana se dividía principalmente en patricios y plebeyos. Los derechos y deberes de estas castas cambiaron con el paso de una época a otra.
La sociedad en la época republicana
La población romana se dividía en dos grupos: patricios y plebeyos.
Los patricios eran los descendientes de las familias más antiguas y poderosas y poseían muchas tierras. Los plebeyos, en cambio, eran en su mayoría artesanos o campesinos que trabajaban las tierras de los patricios. Estos últimos ejercían el poder político; los plebeyos, en cambio, no podían participar en el gobierno. Las dos comunidades estaban claramente diferenciadas: los patricios se casaban entre sí y hacían negocios sólo entre ellos. Los plebeyos sólo podían acortar la distancia que los separaba de los patricios de una manera: convirtiéndose en clientes (=obedientes) de alguna familia patricia. Ofrecían sus servicios y a cambio recibían la protección del jefe de la familia patricia, que se convertía en su mecenas.
Todos los que descendían (o creían descender) de un ancestro común formaban una gens, es decir, un linaje. Los miembros de una gens se sentían profundamente unidos por lazos de sangre, aunque muy a menudo el antepasado común era legendario.
Dentro de las gentes (plural de gens) existían entonces las familias, muy parecidas a las actuales. En ellos, el padre ejercía una gran autoridad sobre su mujer y sus hijos.
Los esclavos también formaban parte de la familia. Cada romano tenía el nombre de la gens a la que pertenecía ( nomen ): los pertenecientes a la línea Claudia se llamaban todos Claudio. El nomen iba precedido del nombre personal ( praenomen ) y finalmente se añadía el apodo ( cognomen ). El cognomen, muchas veces, tiene su origen en un detalle físico de la persona o en el lugar de origen de su linaje. Así, cada ciudadano romano tenía tres nombres.
La sociedad en la época imperial
Durante el imperio las clases sociales sufrieron una evolución que afectó a los nobles, las clases medias y el ejército. Entre los nobles había un cambio: los nuevos ricos se habían formado en las provincias y muchos de ellos se habían incorporado al senado. Los signos de su riqueza eran sus casas y sus suntuosas cenas. En las ciudades de provincia los romanos favorecieron la formación de una clase burguesa activa: terratenientes, comerciantes, profesionales, funcionarios del Estado. También formaban parte de la burguesía romana los artesanos que poseían talleres muy activos, que se reunían en organizaciones profesionales llamadas "colegios".
El ejército también mostró un alto grado de eficiencia bajo los Flavios y los Antoninos. Muchos provincianos sirvieron en las legiones, que obtuvieron la ciudadanía romana al final de su servicio. Ser soldado no sólo significaba luchar, sino también colonizar tierras, construir caminos, puentes y fortificaciones, fundar el primer núcleo de las futuras ciudades y supervisar su civilización y seguridad.
Sin embargo, las condiciones de la plebe romana no habían cambiado en absoluto. El Estado todavía tenía que mantener a casi 200.000 ociosos, que exigían comida y entretenimiento gratuitos (panem et circenses) como un derecho. Por otro lado, los emperadores preferían ganarse el favor de la plebe de esta manera.